no es por el cambio de estación
a cada paso.
ni esos desencuentros de
mala película, en
los recreos
entre cada canción.
no por la mosca
que se envuelve en
los pelos de la alfombra, y
los ojos tuyos, cansados, reteniendo
al suelo, antes de ser invadido.
de alfombra,
de mosca,
de almohadón y mí.
es, este nudo,
por tu respiración
antes del pensamiento
que va antes
de que salgan las palabras
que seleccionaste
para que afecten a
mis
palabras.
es por el suspiro húmedo,
de verano celoso,
que se ahorra
lo que más querría
que sí
pero no.
